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Los altavoces deben estar en cajas acústicas selladas porque están compuestos de una membrana con una cara interna y otra externa. A través de esta membrana, se crea una onda interna y otra en fase inversa.
Por lo tanto, las cajas acústicas selladas colaboran con que el sonido se potencie y no se pierdan los graves o la calidad del resto de las ondas. Al tener el altavoz en una caja, se elimina el problema de la deficiencia en el sonido.
Si quieres conocer por qué debes elegir una caja acústica sellada para tu equipo de sonido, en este post te lo contamos.
La caja sellada es la de tipo más básico y consiste en una caja con material absorbente de sonido en su interior. Según la calidad del sellado, será la calidad final del sonido.
Mediante su material absorbente, busca eliminar completamente la onda producida por la parte interna del diafragma, es decir, que tiene una frecuencia de corte.
La gran ventaja de este tipo de cajas es que suelen tener un tamaño moderado y la pendiente de atenuación de respuesta no es muy pronunciada. Por otra parte, la respuesta temporal es adecuada.
Su desventaja radica en que la frecuencia de corte no es muy baja, aunque sea una caja de tamaño normal. El aire contenido en la caja actúa como un muelle y distorsiona el sonido a alto volumen.
Su primera función consiste en separar la onda sonora del frente de la onda posterior. Esta separación permite que las ondas, que están fuera de fase una respecto a la otra, no se cancelen mutuamente.
En segundo lugar, contribuyen al control del mecanismo electroacústico. Algunos tipos de cajas acústicas permiten un buen uso de la onda posterior, para priorizar la respuesta de ciertas frecuencias, mientras que otros diseños dependen de la presión del cono de la bocina dentro de la caja.
Una caja acústica sellada ofrece un espacio hermético detrás de la bocina del subwoofer. Este espacio tiene la función de amortiguación acústica a partir de los cambios de presión a medida que el cono de la bocina ondula hacia adelante y hacia atrás.
Los cambios de presión ayudan al cono a regresar a su posición original, o de descanso. Esto colabora con una mayor precisión de la reproducción del sonido, pero se toma cierta parte de la eficiencia del sonido.
Las cajas selladas requieren mayor poder de amplificación para igualar los niveles de presión de sonido que otro tipo de cajas. Sin embargo, este tipo de cajas acústicas suele ser más pequeña que las otras.
Por otra parte, las cajas acústicas ventiladas cuentan con una abertura para que escape el aire y el sonido. Esto da como resultado una mayor energía de sonido proyectada hacia adelante de la caja de bocina.
El tamaño del respirador influye sobre el sonido general del subwoofer porque define las frecuencias que la caja reproduce. Este proceso también es conocido como afinado.
Además, el volumen del espacio detrás de una bocina ventilada también debe ser más grande para que las ondas de baja frecuencia puedan desarrollarse.
La caja acústica se corresponde con el tipo de subwoofer. Es decir, que algunos amplificadores son más aptos para utilizarse en cajas acústicas ventiladas.
La Eficiencia del Ancho de Banda del Producto (EBP) es un buen criterio de selección para saber qué tipo de caja acústica se acomoda mejor a cierto subwoofer. Según su cálculo, puedes determinar qué tipo de caja es adecuada:
Cuando una bocina está diseñada para ser utilizada con una caja acústica sellada, suele contar con una respuesta de frecuencias con mayor ondulación. Esto se traduce en una reproducción de graves descontroladas.
Es decir, que los sonidos se reproducirán de una manera más pesada o débil y de manera aleatoria. Sin embargo, hay casos donde estos resultados son los deseados para que los sonidos suenen más fuertes.
Un factor determinante de la calidad y color o tonalidades frecuenciales predominantes en un altavoz es la caja acústica. Según el material, se clasifica como caja de gama alta o baja.
Generalmente, las cajas de gama baja son construidas en material plástico. Sin embargo, las cajas construidas en madera suelen ser mucho más funcionales porque este material tiene mejores cualidades físicas para procesar el sonido.
Por otra parte, la densidad de la madera utilizada determinará las propiedades mecánicas y de estabilidad en todas las direcciones espaciales a lo largo del tiempo.
Por ejemplo, la madera de densidad media o DM es muy utilizada por sus buenas propiedades y su reducido costo. Sin embargo, su desventaja es la poca densidad que posee y esto obliga a utilizar espesores para alcanzar el aislamiento.
Otra cualidad poco positiva de esta madera es la de permitir interferencias producto de la vibración de la caja. A pesar de sus desventajas, el DM es mucho mejor que otras maderas utilizadas en altavoces de diferentes gamas durante mucho tiempo.
En cajas acústicas de gama más alta, se utilizan maderas de conglomerado, de madera maciza natural o laminados prensados a alta presión.
La ventaja de los laminados radica en su mayor densidad, resistencia y dureza. Además de sus propiedades acústicas excelentes y el mínimo de vibraciones admitidas. Es decir, que el sonido se presenta sumamente definido.
Una caja acústica adecuada potenciará el sonido de tus altavoces. Sin embargo, para que elijas la mejor según tus necesidades, es fundamental que conozcas bien qué tipo de resultados ofrece cada una de ellas.
La consideración de todos los factores que te contamos en este artículo te permitirá alcanzar un sonido excelente en tu equipo de car audio.
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